El manifiesto SCUM de Valerie Solanas

A través de esta película sentí interés por la obra de Solanas “El manifiesto SCUM”, su panfleto más famoso. En este manifiesto Solanas analiza la sociedad masculina de su tiempo y propone una solución radical a todos los problemas: la eliminación del macho.

El panfleto es muy exaltado y excesivo. Caricaturiza al “macho” e idealiza a la mujer-mujer que es independiente y no está constreñida por la voluntad del macho. El hombre carece de sentimientos, de empatía, de verdadera inteligencia y sentido de la vida; la mujer de verdad, por el contrario, es activa, imaginativa, emocional, etc. Argumenta Solanas que siendo posible la reproducción sin machos en un futuro próximo las mujeres deberían tomar el poder y eliminar a los hombres.

A pesar de su radicalidad el manifiesto SCUM plantea muchos temas sobre los que reflexionar. Por ejemplo, Solanas sustituye la “envidia del pene”, que según movimientos psicoanalíticos condiciona la vida mental de la mujer, por la “envidia del coño” que corroe a todos los hombres y cuya frustración hace a los hombres agresivos y posesivos con las mujeres. Sin tomar posición lo cierto es que es llamativo que el travestismo o el cambio de sexo sean opciones mayoritariamente masculinas, incluso es usual que en las fiestas de carnaval los hombres se disfracen de mujeres ¿Muestra estas tendencias el complejo oculto del que habla la autora?

Otro punto interesante de su manifiesto es la importancia que le da Valerie a la futura posibilidad de prescindir del trabajo usando máquinas. Ella llama esto el automatismo completo ¿Por qué no se ha alcanzado aún? Solanas cree que el deseo de dinero es infinito y que satisfacer este deseo llena las vidas insulsas de los machos; con el automatismo total no existiría dinero que, al fin y al cabo, es el sentido de la vida del macho y su mecanismo de dominio sobre la mujer. Sin coincidir en las conclusiones de la autora sí me parece que la pregunta de por qué seguimos trabajando 8 horas al día cuando las máquinas pueden sustituir muchos de los trabajos más duros debe plantearse. A mi juicio la falta de interés de los gobiernos en la automatización se debe a dos factores: el deseo de muchas personas de tener un trabajo absorbente que le evite pensar verdaderamente si la vida que lleva es la que quiere llevar, en esto coincido con Solanas. El segundo factor es la escalada de “progreso” hasta el infinito de las actuales democracias capitalistas; esta escalada sin término, además de arrastrar a todo el mundo en ella, nos obliga a invertir horas y horas de trabajo en conseguir “bienes de lujo imprescindibles” que engrasan, a su vez, un sistema económico demencial. ¿Es posible la reducción de horas de trabajo hoy por hoy? Es obvio que sí, sin embargo ni siquiera la incorporación de la mujer al mercado laboral que teóricamente podría duplicar la fuerza de trabajo disponible en la sociedad ha traído la reducción de la jornada, incluso en Europa se propone la aprobación de jornadas de trabajo de 65 horas ¿qué está fallando aquí?

Lamentablemente la obra de Solanas no sirve hoy tanto al feminismo como a la propaganda machista que presenta su manifiesto como muestra sesgada del movimiento feminista. Sin embargo, como varón la lectura de este manifiesto me ha permitido comprender una cosa que hasta antes no me había parado a pensar y es como se debe sentir una mujer cuando desde la Iglesia o desde posturas ideológicas reaccionarias se denigra su dignidad y se la presenta como una especie de “sub varón”. Solanas da la vuelta a la tortilla y presenta al hombre como una hembra incompleta, aunque solo sirva como revulsivo al androcentrismo, aunque solo sea para que entendamos lo absurdo y dañinos de los estereotipos de género “El manifiesto SCUM” merece la pena leerse.